José Guadalupe Robledo Guerrero.
Aun cuando el presidente López Obrador, después de la concentración en Toluca, aumentó la lista de los presidenciables a seis corcholatas, agregando a Tatiana Clouthier, Esteban Moctezuma y Ricardo Monreal; lo cierto es que en el imaginario colectivo son solo tres aspirantes de donde saldrá el candidato de Morena para la presidencia de la República: Claudia Sheinbaum Pardo, Adán Augusto López Hernández y Marcelo Ebrard Casaubón, en el mismo orden de posibilidades como aparecieron formados en la capital del Edomex el pasado 12 de junio.
También es verdad, que solo uno de los precandidatos exhibidos, será el afortunado que recibirá la candidatura y el apoyo del tomador de decisiones, y hasta ahora se ve como la elegida a Claudia Sheinbaum, aunque según las preferencias electorales la gobernadora de la Ciudad de México está en segundo lugar, lo cual no es importante, porque según se ve tiene el principal voto a su favor, el del presidente López Obrador.
Esto me hizo recordar a un coahuilense, Atanasio González, que cuando se acercaban los tiempos de la sucesión en el estado, siempre se aparecía haciendo carnes asadas a lo largo y ancho de Coahuila, buscando que lo tomaran en cuenta como precandidato al gobierno estatal. En 1981, antes de la decisión cupular, uno de los cortesanos de José de las Fuentes Rodríguez le informó que Atanasio -como era su costumbre- andaba haciendo carnes asadas en el territorio coahuilense, y “El Diablo” le contestó con su peculiar tono: “No se preocupe muchachón, mientras no haga una carne asada en Los Pinos, déjelo que gaste su lana como él quiera”. Así era y así sigue siendo.
Ese conocimiento político, tan básico como simple, ya se extinguió en los ámbitos del poder, por eso hoy la gran mayoría de los analistas y comentaristas se dedican a darle posibilidades a sus preferidos, tratando de cambiar el “destino manifiesto”, que no es otro que la decisión del que manda, y en este caso es AMLO.
Sin embargo, en 2024 el juego preelectoral no se termina con la decisión del “Destino manifiesto”, eso es solo una parte, pues falta pensar qué pasará con los que quedarán fuera de la decisión. En el caso de Adán Augusto, si no es el favorecido, con toda seguridad aceptará la línea presidencial, lo mismo pasará con Claudia Sheinbaum. Con estos dos precandidatos no habrá inconformidades, solo hay que recordar aquello de 90 por ciento de lealtad y 10 por ciento del resto, y ambos llenan el requisito presidencial.
El problema, si es que lo hay, surgirá de otros precandidatos, a saber: Marcelo Ebrard y Ricardo Monreal, pues si se inconforman -como muchos suponen que lo harán- buscarán aparecer en la boleta de votación por otro partido, siempre y cuando estén dispuestos a enfrentar el poderío del tomador de decisiones, y si no, lo que les queda es sumarse a la elegida o al favorecido.
Este comentario viene a cuento, porque los partidos de oposición siguen buscando a quien le entregarán su franquicia para que compita en 2024, sin tener a un personaje con posibilidades de triunfo, pues no tienen alguno presentable para darle la pelea al poder que tiene en sus manos AMLO. Pero no hay que olvidar el sabio refrán popular: “para que la cuña apriete, debe ser del mismo palo”.
Por eso muchos creen que si la oposición encuentra un buen prospecto, éste será de Morena, y solo se ven dos: Ebrard y Monreal, que desde el inicio del sexenio lopezobradorista, se insiste en que van en el mismo barco, que están aliados en un proyecto. ¿Serán capaces de desafiar al poderoso presidente? Esa es la cuestión, porque no hay que olvidar aquello de que: “para tener la lengua larga, hay que tener la cola corta”.
Por cierto, aun con lo evidente de que no hay “piso parejo”, y que desde ahora habrá golpes bajos y “fuego amigo” entre los presidenciables, los tres precandidatos exhibidos insistieron en la unidad, que es parte de los “Tiempos perfectos del Señor” a los que aludió el secretario de Gobernación, Adán Augusto López. También en el evento de Toluca, Claudia Sheinbaum lanzó el mensaje sobre cuál será lo que enmarque la unidad en la desigual competencia: “Nada personal está por encima de los intereses sagrados del pueblo de México”.
De todos modos, ya comenzó la carrera rumbo a la sucesión presidencial, y se inició en Toluca el pasado 12 de junio, y proseguirá hasta 2024, aunque desde ahora se acusa que se violó la ley con actos adelantados de campaña, que dicho sea de paso, esta ley fue aprobada por los mismos que ahora la violan y también por los que se quejan.
Por último, para los opositores existe una anécdota histórica que se hace necesario recordar: Aisha, reina de Granada y madre del último rey musulmán, Boabdil El Chico, le recriminó a su hijo vencido, cuando camino del exilio miró hacía Granada soltando el llanto, su madre le dijo: “Llora como una mujer, lo que no supiste defender como un hombre”.
Esto viene a colación, porque es necesario que los expresidentes, los Boabdil mexicanos, se callen, dejen de lloriquear y de contaminar aún más el ambiente político, pues ni Vicente Fox, ni Felipe Calderón, tienen autoridad moral para defender a la República. Basta recordar la corrupción de los hijitos de Marta Sahagún y la de Genaro García Luna.
Hoy la oposición se lamenta haber perdido el poder frente a Andrés Manuel López Obrador, sin darse cuenta que ellos fueron los que provocaron su derrota, porque no frenaron la corrupción y la impunidad que tanto se les criticó, y pese a ello, hasta ahora no han mostrado su arrepentimiento por los latrocinios cometidos en sus gobiernos.
Seguramente cuando hagan un acto de contrición y un mea culpa tendrán que pedir perdón por todo el daño que le causaron a México y a los mexicanos. Por allí debe empezar la oposición, antes de buscar con quien contender en 2024 por la presidencia de la república. Seguiremos esperando…
Política aldeana
La historia se repite: El pasado 10 de junio los pobladores de Papatlazolco, municipio de Huauchinango, Puebla, lincharon a golpes y prendieron fuego al joven abogado de 31 años, Daniel Picazo, quien se desempeñaba como colaborador de una legisladora en la Cámara de Diputados. El motivo fue, que lo acusaron de intentar robarse a un menor de edad. Este mismo sadismo, de enardecidos y manipulados pobladores, ha ocurrido por aquellos rumbos en múltiples ocasiones. Esta orgía asesina se manifestó en San Miguel Canoa, Puebla, el 14 de septiembre de 1968, cuando cinco jóvenes trabajadores de la Universidad poblana que iban de excursión al volcán Malintzin, tuvieron que pernoctar en esa localidad. En eso estaban cuando el sacerdote de la iglesia instigó a los pobladores, acusando a los jóvenes de comunistas y de intentar poner una bandera rojinegra en la iglesia en apoyo del movimiento estudiantil de 1968, a dos semanas que ocurriera la matanza de Tlatelolco. El sacerdote convocó a la feligresía, según él, para evitar que insultaran a Dios y a la patria, y para impedir que despojaran de sus bienes a los pobladores y prohibieran la religión. Instigados por el cura, los pobladores masacraron a tres de los cinco jóvenes y al dueño de la casa que los albergaba. Este criminal suceso quedó para la posteridad en la película “Canoa” de Felipe Cazals de 1975.
Preguntas huérfanas
¿Será cierto que las caravanas de migrantes organizadas en los últimos tres años, han sido programadas por algunos gobiernos latinoamericanos para poner en jaque al gobierno estadunidense?
¿Será casual que la última caravana, la que está padeciendo Coahuila actualmente, está integrada en su inmensa mayoría por venezolanos y cubanos que nadie sabe cómo pudieron abandonar sus países?
