José C. Serrano Cuevas.
Los oráculos modernos vislumbran un cisma en la oposición mexicana. El Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) han anunciado la «suspensión temporal» de la coalición que ambos mantenían con el Partido Revolucionario Institucional (PRI). La causa es la iniciativa presentada por este partido en el Congreso para que se prorrogue hasta 2028 la presencia de los militares en las calles de México, ejerciendo tareas de seguridad pública.
La iniciativa también divide al PRI, cuyos líderes en el Senado no están de acuerdo con esta medida. El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), manifestó el pasado martes 6 de septiembre su apoyo a la iniciativa del partido tricolor, lo que profundizó aún más las grietas entre los grupos opositores.
La tormenta política tiene capítulos adyacentes que no han pasado inadvertidos entre los analistas políticos. Alejandro Moreno Cárdenas, Alito, tiene pendiente un pleito judicial por enriquecimiento ilícito a solicitud de la Fiscalía de Campeche, para lo que se necesita su desafuero como diputado.
La ruptura con sus socios y el apoyo al requerimiento del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en su estrategia de seguridad pública, sería la moneda de cambio para su protección ante los tribunales, según han manifestado analistas en medios informativos.
Marko Cortés Mendoza, líder del PAN y Jesús Zambrano Grijalva, dirigente del PRD, firmaron un comunicado en el que solicitaban al PRI que no pusiera en riesgo las posibilidades del bloque opositor contra Morena en los comicios presidenciales a celebrarse en 2024. Ambos reconocen las «aportaciones históricas» del Ejército al país, pero no quieren que los militares sean culpados por la ciudadanía «ante el fracaso de la estrategia de seguridad del actual gobierno».
El cisma en la oposición, anunciado por analistas políticos, puede convertirse en una coyuntura favorable para el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, quien aún, al decir de sus simpatizantes, tiene posibilidades de crecer rumbo a 2024.
El secretario de Gobernación ya figura en las encuestas, por lo que podría, según sus seguidores, utilizar su cargo para placearse y estar listo por si el «plan a» rumbo a la Presidencia se cae, dicen expertos en temas electorales.
Rumbo a las elecciones de 2024, Marcelo Ebrard Casaubón, secretario de Relaciones Exteriores y Claudia Sheinbaum Pardo, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, aventajan en las encuestas al tabasqueño Adán Augusto López Hernández, porque éste entró a la tómbola meses después que los primeros. Sin embargo, es quien más oportunidades tiene de crecer, pues, ser el encargado de la política interior le permitirá asomarse por todo el país, puede viajar todos los días a donde quiera y, en sus visitas, conocer y analizar problemas en los estados.
En la historia contemporánea de México hay varios secretarios de Gobernación que dieron el salto a una candidatura por la Presidencia de la República: Gustavo Díaz Ordaz (PRI), Luis Echeverría Álvarez (PRI), Francisco Labastida Ochoa (PRI). Los dos primeros portaron la banda presidencial en sus respectivos sexenios.
Analistas tenaces expresan que aún es tiempo de pensar en una nueva oposición unida que sea capaz de encontrar un candidato sin rechazos y con capacidad de comunicar, ese candidato estará en la pelea. La elección de 2024 será una elección de contexto no de personas.
