Oliverio Ascascius.
Sólo por hoy escribiré
unas líneas a tu voz,
esa voz de felicidad y dulzura.
En tres palabras
hacia arriba,
en tres palabras
hacia abajo.
Tu voz quedará flotando
en el poema de mi mente.
y en la mente de mi cuerpo.
Y he aquí, las palabras:
Tu voz es como el misterio de vivir.
Es como el canto del agua hecho bruma.
Es como el remanso solitario
que serena la impetuosidad de las cosas,
y le da estilo a las pasiones.