José C. Serrano Cuevas.
Durango está en alerta por un brote de meningitis. Por tal razón, ha habido 19 decesos, 18 mujeres y un hombre en cuatro hospitales privados de la capital del estado, debido a un hongo presente en cuatro lotes de bupivacaína, un anestésico local. Hay, además, 68 casos positivos confirmados, de acuerdo con la Secretaría de Salud de Durango (SSD). No obstante que las autoridades han habilitado áreas especiales en los centros públicos para tratar la infección. La situación continúa en proceso de estabilización.
El hongo es muy agresivo, explica el médico Eder Zamarrón, especialista en terapia intensiva y divulgador científico. Los expertos han coincidido en que la hipótesis más probable es que el medicamento fue contaminado por un mal manejo en los hospitales: «Sería especulativo atribuir los casos a los frascos fabricados, almacenados o al uso mismo del anestésico en los pacientes», afirmó el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, en un comunicado.
La enfermedad no se contagia de persona a persona. Las autoridades sanitarias están monitoreando a todas las personas que recibieron el medicamente desde marzo de 2022 en cualquiera de los cuatro hospitales afectados -Del Parque, Santé, Dikcava y San Carlos, todos ubicados en la ciudad de Durango.
El subsecretario López-Gatell ha dicho que la investigación para determinar las causas de la meningitis llevará tiempo, y estará enfocada en ubicar en qué punto del proceso ocurrió la contaminación.
La alarma por la meningitis, una enfermedad infecciosa que inflama las envolturas del cerebro y la médula espinal, comenzó a principios de noviembre del año en curso. Entonces, todavía no estaba claro el origen del padecimiento. Análisis específicos revelan que en el caso de Durango el causante es un hongo -de nombre científico Fusarium solani- presente en las partidas de bupivacaína y bupivacaína pesada. El medicamento es un anestésico local utilizado en cirugías cortas.
Las partidas contaminadas fueron fabricadas por Pisa, una farmacéutica con base en México, aunque los expertos consultados coinciden en descartar que el hongo estuviera presente en el fármaco desde su producción. Al contrario, señalan que lo más probable es que fuera comprometido en los cuatro hospitales en los que se han registrado infecciones, ya que la empresa suministra el mismo medicamento a todo el país.
Consuelo Tinajero, anestesióloga en el Hospital General de Silao, Guanajuato ha seguido el brote desde el inicio: «Como anestesiólogos se nos notificó que estaban ocurriendo casos de meningitis en la ciudad de Durango, y se les estaba asociando al uso de bupivacaína. En el hospital donde laboro, realizamos entre 12 y 15 anestesias neuroaxiales diarias, porque atendemos pacientes embarazadas y para una cesárea es la anestesia ideal», expresó.
El doctor Alejandro Macías, uno de los más reconocidos especialistas en infecciones en México, dice que en varones se usa en operaciones de hemorroides, eso explica por qué están afectadas, mayoritariamente, mujeres con cesáreas. El galeno suelta a bocajarro: «Una de las hipótesis más probables es que por ahorrar recursos hayan reutilizado las agujas».
En conversaciones del doctor Hugo López- Gatell Ramírez, con Esteban Villegas Villarreal, gobernador de Durango, identificaron la oportunidad de pedir ayuda a agencias como los Centros de Control de Enfermedades de Estados Unidos, a través de la División de Enfermedades Infecciosas Causadas por Hongos, de la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) que ha estado en diálogo con la Cofepris (Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios) en esta materia, y también con un grupo de académicos de la Universidad de Texas y las universidades del Reino Unido.
Si la hipóteis más contundente en las causas de la meningitis resulta ser la planteada por el doctor Alejandro Macías, urge una supervisión concienzuda del uso del instrumental médico en los procedimientos quirúrgicos, para desterrar de los campos clínicos las yatrogenias tan socorridas.