Profesor Evaristo Velasco Álvarez.
¡Qué locura! En los Estados de Yucatán, Quintana Roo, Campeche, Tabasco y Chiapas, según los planes del presidente López Obrador, circulará el TREN MAYA, el que pretende llevar muchas fuentes de trabajo a los habitantes de la península, en casi todas las formas lícitas de hacerlo: trabajadores de albañilería, carpinteros, hojalateros, plomeros, meseros, guías de turismo, banqueros, choferes, contadores, arquitectos, ingenieros, afanadores, publicistas, diseñadores gráficos, y miles de empleos y oficios varios.
Implica movilizar a toda la población del sureste de México, dotándoles de miles de oportunidades para su desarrollo, que ya es necesario contratar empleados de fuera no tan solo de la península, sino del país, como médicos, enfermeras, camilleros, administradores, etc.
Pero increíblemente, una jueza de Yucatán, quien “considera que la construcción del TREN MAYA provocará daños profundos a la forestación de la región, así como a los cenotes, porque el paso del tren estará afectando terriblemente la estabilidad de la superficie terrestre, dañando el patrimonio nacional de miles de años”, por lo que está decidiendo: que en el tramo 5 del tren, se suspenda definitivamente la obra.
Ahora bien, desde hace ya muchos años, las empresas hoteleras y todas las actividades que se requieren para hacer funcionar correctamente los hoteles, como transporte, zonas habitacionales, vías de transporte, etc., han estado dañando lo mismo que denuncian, con el beneplácito de las autoridades nacionales e internacionales, sin que ello haya merecido ni tan solo una reprimenda para los dueños de los hoteles y de toda la red de servicios necesarios.
Y resulta que si tú vas y le preguntas a los habitantes de la región, te dirán que ellos están felices y que la deforestación o daños ambientalistas, es algo falso y es promovido por gente que ni siquiera habitan la región, que son PSEUDO AMBIENTALISTAS, pagados por alguien. Los habitantes de los 5 Estados están felices; entonces ¿Qué le pasa a esta jueza? ¿De a cómo fue el billete? Amigo lector, ¿Tú qué opinas? A mí me parece que el Tren Maya y obras como esta hacen mucho bien a la nación, para ¡Que viva México!
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