Fernando Rangel de León.
Desde que se creó el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en 1960, en Torreón, las demandas de sus trabajadores en su contra, eran de la competencia por razón de territorio de la Junta Especial 42, de la Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCyA).
Así, durante los últimos 63 años, los juicios de las demandas de los conflictos laborales de los trabajadores con el ISSSTE, se presentaban, tramitaban y resolvían, aquí en esta misma ciudad.
Desde luego que lo anterior fue un servicio público de la impartición de la justicia laboral muy benéfico para los trabajadores del ISSSTE, de toda la Laguna, pues a los abogados que los defendían, solo les bastaba ir al Palacio Federal, en donde se encuentra la JFCyA, para atender los juicios.
Pero cuál no sería la sorpresa de los trabajadores del ISSSTE, que al ir en estos primeros días de noviembre a ver sus juicios, se encontraron con la desagradable sorpresa de que la JFCyA, dejará de tener competencia para conocer asuntos promovidos en contra del ISSSTE.
Pero la sorpresa aumentó cuando se enteraron que todos los juicios pendientes en la JFCyA, de Torreón, fueron enviados a la Ciudad de México, para su continuación y conclusión, sin previo aviso.
Todo esto se hizo por órdenes de Marath Baruch Bolaños López, Secretario de Trabajo y Previsión Social, quien sustituyó a Luisa María Alcalde Luján, actual Secretaria de Gobernación.
Esta muy mala noticia no se compadece para nada con lo que dice el Presidente de México, de que se trabaja para una Cuarta Transformación del país, pues la determinación de llevarse a la Ciudad de México todos los expedientes de los juicios laborales contra el ISSSTE que estaban aquí en Torreón, perjudica muy severamente a la clase trabajadora, a la que menos tiene.
Si los trabajadores del ISSSTE, a veces no tenían los recursos económicos ni para trasladarse de San Pedro, Viesca, Francisco I. Madero y Matamoros, por el lado de Coahuila; de Mapimí, Tlahualilo, Lerdo y Gómez Palacio, por el lado de Durango, para ver sus juicios a la JFCyA de Torreón, mucho menos van a tener dinero para ir y venir a la ciudad de México.
Probablemente el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien tanto repite que en su gobierno primero los pobres, no esté enterado de esta dañina e impactante determinación de quitarle a Torreón, y a la Laguna, este importante servicio público de administración de justicia laboral.
Esperamos que el Primer Mandatario de la Nación, al enterarse de este atropello tan dañino, inmediatamente repare el mal que está cometiendo su flamante Secretario de Trabajo y Previsión Social.
