Enrique Gómez Dena.
Honro de la vida ese camino
Tan diferente para todos. . .
Que transitamos a través de los años
Y como regalo de vida, logramos llegar
A una cierta mayoría de edad. . .
Llevando consigo lo que el tiempo
A nuestro cansado cuerpo le ha dado
A esa edad a ésa hermosa edad
Donde vivimos y almacenamos
Tantas ilusiones, experiencias
Éxitos y fracasos una larga lista
Como para contar o editar un libro
Donde a nuestro paso dejamos huella
En este camino de paso. . .
De ese nuestro cuerpo ya fatigado
Que respira y vive sus recuerdos
En la tranquilidad y aparente soledad
En el reloj del tiempo manecillas sin parar
Los años se han acumulado
Y nos convertimos en una carga
Nos llaman ancianos, pero somos aún más
Pisamos una nueva etapa que es la VEJEZ. . .
Y aun en silencio luchamos . . .
Para esperar la luz del final del camino
Y abordar la vida eterna. . .
Honremos también a ese refugio bendito
Ésa que será nuestra segunda casa
Donde amorosos brazos y dulces palabras
De seres tan nobles y generosos
Nos reciben, nos cubren, nos protegen. . .
Nos soportan, nos abrazan y miman
A esos nuestros hermosos custodios
Cubiertos de amor que derraman por nosotros
DIOS los premiará en su justo tiempo
Por sus finas atenciones que brindan
Y ahora aquí nuevos huéspedes
Nueva familia, nuevo hogar. . .
Que llamamos LA CASA DEL ANCIANO
Donde habitan seres hermosos
Con corazones que vibran.
Fin.
