Abigail A. Correa Cisneros.
Los candidatos aspirantes para gobernar en el siguiente sexenio solamente se han quejado de la herencia y el mal trabajo de los regímenes pasados y el actual. En cuestión de seguridad, llueven reclamos porque en la actualidad es la principal preocupación de los mexicanos, así lo reveló la pasada Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública en setiembre pasado. Y es que con todo y la Guardia Nacional los resultados no han sido óptimos. Desde la perspectiva de derechos humanos, la militarización en un país no es la mejor estrategia, pero es la opción ante la falta de un modelo de seguridad que realmente garantice la seguridad ciudadana. Por otra parte, como resaltó en su momento Nashieli Ramírez Hernández, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, algunas estrategias del gobierno actual son positivas, como la prevención de adicciones que ahora tiene un enfoque desde el derecho a la salud y evita la criminalización del consumo.
Independientemente de lo que asegura el presidente Andrés Manuel López Obrador, sobre si ya no hay violencia en el país y es más bien el auge de grupos criminales lo que vivimos, la sensación de la población es que estamos a merced de estos delincuentes porque nunca sabemos si vamos a estar en el cruce de fuego. La estrategia de abrazos no balazos necesita más de seis años para tener efecto en un México que desde hace décadas ha permitido el fortalecimiento del crimen organizado. Será el próximo ocupante de Palacio Nacional quien mantenga esta línea o cambie el rumbo, como se hizo en la Ciudad de México, donde se reportó una baja en el índice delictivo cuando estuvo a la cabeza Claudia Sheinbaum, quien lidera las encuestas.
La candidata de la coalición Sigamos haciendo historia plantea en su proyecto de gobierno atacar la delincuencia desde tres ejes: “atención a las causas (especialmente entre jóvenes); coordinación (mantener los gabinetes de seguridad y fortalecer la coordinación entre autoridades y niveles de gobierno); y la investigación (consolidar capacidades de investigación para la neutralización de generadores de violencia; la judicialización de casos para combatir la impunidad y el uso efectivo de herramientas tecnológicas y policiacas para la generación de inteligencia accionable). Mientras que Xóchitl Gálvez pretende fortalecer la Guardia Nacional y que tenga un mando civil, así como que el ejército se concentre en recuperar el territorio que tiene el crimen organizado. En uno de sus mítines aseguró que no pactará con la delincuencia, aunque su estrategia formal la presentará en el siguiente debate, dijo.
Es lamentable que en medio de las campañas políticas se aborde el tema de las desapariciones como una promesa vana sumada a las ya dichas en el pasado. Las madres buscadoras siguen encontrando fosas en México pero muchas aún no logran encontrar a sus hijos. En México, en un grito desesperado, una de las buscadoras, Delia Quiroga del Colectivo Nacional de Víctimas 10 de Marzo, llamó a un acuerdo de paz a cárteles del crimen organizado para que cesen los conflictos armados y se erradique la desaparición forzada de personas.
Ante la constante desaparición de personas en territorio mexicano, el presidente insiste en que su gobierno ha hecho un buen trabajo para combatir este problema y fue algo desatinada la declaración que hizo sobre una madre que sigue buscando a sus hijos, Ceci Flores, a quien señaló de lucrar con el dolor humano, como si ella no padeciera la angustia igual que muchas madres que siguen buscando a sus hijos. Es claro que quienes lucran con el dolor humano son algunos candidatos, que se aprovechan de que los resultados en el hallazgo de desaparecidos no sean los deseados.
Cecilia Flores representa a cientos de madres que se encontraron con la indiferencia de las autoridades; ella misma en 2015, durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, no obtuvo respuesta de las autoridades ante la desaparición de uno de sus hijos. Dice conocer la verdad, pero nunca ha tenido justicia, y su persistencia radica en eso, que junto con otras madres, padres, hermanos, las autoridades hagan un mínimo de lo que los buscadores hacen. Los colectivos han encontrado restos humanos en varias zonas del país, caminan horas en el desierto o lugares remotos donde posiblemente localicen fosas clandestinas y siempre encontrándose con autoridades indiferentes que incluso entorpecen su labor.
Lo reprobable es que los candidatos sigan usando el discurso de los desaparecidos y utilizando a las víctimas como as para persuadir al electorado, cuando está demostrado que los gobiernos del PRI y PAN fueron cómplices del crimen organizado, mantenían altos mandos, como Genaro García Luna, al servicio de los criminales, y ocultaron pruebas y culpables como en el caso de los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa. El cinismo de los candidatos de oposición rebasa ya los límites al dar por hecho que los mexicanos ignoran estos hechos.
Desde el Centro
El calentamiento global sigue alertando a la humanidad por acontecimientos como las recientes inundaciones en Brasil. En México se espera que El Niño comience a afectar a finales de este mes, por lo pronto en el país sudamericano causó uno de los peores desastres de la historia que dejó casi cien muertos, decenas de desaparecidos y 1.5 millones de damnificados. El año pasado Brasil sufrió fuertes inundaciones; sin embargo este año, la combinación de masas de aire tropicales y polares con los efectos de El Niño significa una mezcla desastrosa que sigue latente esta semana. Expertos como Alejandro Jaramillo, del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la UNAM, prevén que en el caso de México el problema son los incendios forestales y la sequía, por lo que el gobierno debe adoptar medidas preventivas que permitan hacer una gestión adecuada de los recursos hídricos, para aprovechar al máximo la temporada de lluvias que se viene, recopilar lo máximo que se pueda de recurso hídrico y gestionarlo adecuadamente para afrontar un escenario desfavorable para el verano de 2024… La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural informó que el abasto nacional de flores ornamentales se encuentra garantizado para los festejos del Día de las Madres, pues en 2023 se produjeron cuatro mil 978 millones de flores y se espera un volumen similar para el presente periodo. El año pasado la producción alcanzó un valor de nueve mil 036 millones de pesos. El Estado de México generó siete mil 058 millones de pesos, es decir, 78.1 por ciento del total nacional.
