Jesús M. Moreno Mejía.
“El gobierno mundial no
podrá ser democrático
…será tiránico.”
Ikram Antaki.
Analistas de política nacional e internacional, así como algunos líderes del mundo occidental, han estado opinando en torno a las consecuencias que traerá el ascenso de Donald Trump como presidente de Estados Unidos de América (EUA), pues representará un inminente desafío para México y para el mundo en general.
Trump será el primer mandatario del vecino país del norte, a partir de 2025, si bien ya lo fue en anterior ocasión (2017-2021), caracterizándose en ese entonces por sus amenazas de imponer aranceles, de levantar un alto muro en la frontera con cargo a nuestro país; un constante discurso anti mexicano y la renegociación al Tratado Comercial México, Estados Unidos y Canadá, todo a su antojo, originando con ello una tensa relación con su país. Pero nuestro gobierno supo manejar sus caprichos, para que no resultaran perjudiciales a nuestra nación.
Ahora, todo parece indicar que el presidente gringo será más radical en su actuación, pues se considera que Trump ya no es el mismo de antes, pues está decidido a tener un gobierno conservador a su particular manera de pensar, dispuesto a romper esquemas en su relación con el resto del mundo, y México no escapa de esa posibilidad.
Recientemente, el virtual presidente electo de los Estados Unidos de América, amenazó con imponer aranceles de un 25 % a México, Canadá y China, tan pronto como asuma el cargo, ya que son parte de sus planes para combatir la inmigración ilegal y el tráfico de drogas, según dijo.
En reciente entrevista a Angela Merkel a una importante revista alemana, la ex canciller de Alemania, afirmó categóricamente: “Trump es un evidente desafío para el mundo y particularmente para el multilateralismo”, lo que significa que irá en contra de todas las líneas políticas que no estén de acuerdo con la visión política de su gobierno.
Sin duda, México está en la mira de Donald Trump, no obstante ser un excelente socio comercial, pero incómodo desde su punto de vista, pues no permite que nuestro gobierno mantenga una cercanía con regímenes antagónicos a EUA, tales como Cuba, China, Venezuela, etc., pudiendo originar exigencias inesperadas, como la reciente amenaza de imponer aranceles de 25 % a los productos que exportamos a su nación y a los que importamos.
La presidenta Claudia Sheinbaum, en representación de México, sigue asumiendo una postura independiente en materia de política exterior, como es la defensa de Cuba al embargo comercial impuesto por EUA hace años y su respaldo a iniciativas alineadas con la izquierda latinoamericana, que no le parecen al gobierno del vecino país del norte.
El tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), que suplió al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), es la columna vertebral de nuestra economía, con exportaciones que representan el 80% del comercio exterior, pero ahora hay duda de que se continúe con dicho tratado.
Volviendo a las recientes declaraciones de Angela Merkel, dijo que es preocupante la relación que existe entre Trump y el millonario Elon Musk, pues “es una alianza que resulta bastante peligrosa para todos los que no comparten sus ideas de un poder sin límites, sobre todo porque éste último, es el propietario del 60 por ciento de los satélites artificiales que orbitan en el espacio. Eso debe preocuparnos enormemente, además de las cuestiones políticas.”
Es conveniente recordar que Elon Musk, uno de los hombres más ricos del mundo, además de ser propietario de las fábricas de vehículos híbridos “Tesla” y también propietario de la plataforma digital “X” (antes Twitter); por consiguiente, uno de los hombres más poderosos del planeta.
Claudia Sheinbaum aseguró no temer lo que haya expresado Trump sobre los aranceles e incluso le escribió una carta, en la que le hace saber la inconveniencia de los aranceles, pues perjudicaría el intercambio comercial, que lo mismo beneficia a empresarios y comerciantes de ambos países. Por tanto, es importante mantener ese equilibrio.
Posteriormente dijo haber dialogado vía telefónica con el presidente electo de EUA sobre los migrantes y el combate a los narcotraficantes en México, haciéndole saber que es una responsabilidad compartida, y que el gobierno mexicano pretende disminuir el número de extranjeros que pasan por nuestro territorio con destino a EUA, y que en lo referente al crimen organizado se está actuando, deteniendo a líderes de carteles. Añadiendo que Trump dijo estar satisfecho. Pero ahora falta saber si éste cumplirá.
¡Hasta la próxima!