Amaranta Madrigal.
Quisiera tu pelo ser de elote
(alimento espiritual de osada raza)
su guisa es nylon exinanido
a vaivén del viento, fatuo.
Quisiera tu cuerpo tener bronce
(núcleo del trabajador porfiado)
gordo producto del fast food
títere de la burguería, fofo.
Quisieran tus manos portar callos
(brotes de jornadas doloridas)
emporios de agiotaje han creado
peleles de egolatría, huecas.
Quisiera tu boca hablar de flores
(exquisito idioma de romance)
ignara de ruidos de quincalla
monigote del insulto, comemierda.
La vida carcomió
con miopía intelectual a tu cerebro
te dotó de entumecida comprensión
mientras construyes tu muro inexpugnable
el mazo de la risa
a tu trasero hace trizas
y macera tu grasa de inmigrante