El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, dijo que la violencia en el estado es un «estigma» y pide fijarse «en lo bueno»; sin embargo, en cuatro meses suman más de 719 homicidios y 858 personas privadas de la libertad.
Pese a la crisis de violencia que enfrenta Sinaloa desde hace cuatro meses, el gobernador Rubén Rocha Moya afirmó que en la entidad “se puede vivir perfectamente bien”.
“Estamos haciendo todas nuestras actividades, los estadios llenos, las escuelas llenas, estamos trabajando, perfectamente bien”, señaló el mandatario este jueves en entrevista con el diario El Imparcial, en su visita por Sonora, en la cual también dijo que todo era parte del estigma que se tenía con relación a Sinaloa y la inseguridad.
“Ese estigma, que nos acredita lamentablemente, sería bueno que se fijaran en lo bueno que tiene Sinaloa. Nosotros somos un pueblo trabajador, somos líderes en la producción de alimentos en muchas áreas y seguimos trabajando, no tenemos la economía parada”, enfatizó.
Las declaraciones del gobernador se contradicen con las cifras, pues del 9 de septiembre cuando inició la ola de violencia en la entidad por el conflicto entre dos facciones del Cártel de Sinaloa, derivado de la captura de Ismael “El Mayo” Zambada en Estados Unidos, al 15 de enero se han registrado 719 homicidios dolosos. Lo que se traduce en 5.6 casos diarios.
Además de 858 personas privadas de la libertad (6.7 diarias) 2 mil 474 vehículos robados (19.2 diarios); 218 personas detenidas (1.7 diarios) y 50 personas abatidas, de acuerdo con el conteo del diario Noroeste basado en información de la Fiscalía del Estado, la Secretaría de Seguridad y registros periodísticos.
Hasta ahora, las tres violencias más relevantes para Sinaloa son los homicidios, las privaciones de la libertad y el robo de vehículos.
