- La Pandemia en Coahuila, en plena recuperación.
- La CTM de Tereso Medina, como vocal empresarial.
- La Iglesia mundial en crisis severa.
Juan Antonio Estrada Soto.
Hay buenas noticias referentes a los habitantes del estado, ya que los números de los últimos meses en cuanto a contagios y muertes por COVID 19 van en retroceso, pues en estos últimos días en su reporte diario tanto contagios y muertes van a la baja y eso son muy buenas noticias ya que por esa lógica, las camas de hospital están en números muy significativamente a la baja y eso es muy esperanzador para los que todavía sufren los estragos de esta enfermedad, que se convirtió en una pandemia cuando los números de infectados y las muertes estaba incontrolable, porque en Saltillo y en general en el estado se tenían números de 400 contagios y por ende infinidad de muertes.
Debido al empeño que puso y a la preocupación sobre este particular que tiene el Gobernador del Estado, Ing. Miguel Ángel Riquelme, es que se está llegando a decir que prácticamente está bajo control esta enfermedad, sin dejar de lado las recomendaciones que se hacen como son el uso de cubre bocas y mantener la sana distancia, esos han sido los elementos claves para contener la pandemia, excelente trabajo del Gobernador y el equipo tanto de salud como otros personajes importantes para hoy estar más tranquilo, ojo sin descuidar las medidas preventivas, en hora buena Sr. Gobernador, honor a quien honor merece.
Por otro lado quien anda mal con sus agremiados es el líder de la CTM Tereso Medina, quien en su afán de quedar bien con sus patrones que son los dueños o representante de las empresas en el estado, se convierte en su vocero adelantando que sus utilidades previstas para este año en curso se verán reducidas por el tema de la pandemia del COVID 19, ya que por ver disminuidos su ingresos por menores ventas de sus productos en este año recibirán menos dinero por este rubro de las utilidades, convirtiéndose en vocero de la clase empresarial en lugar de ser el vocero como tiene obligación y como lo manda el manual de la dirigencia de un sindicato tan importante de la vida nacional como lo es la CTM.
Por último, quien la está pasando muy mal en estos tiempos de pandemia, es la iglesia católica ya que han disminuido drásticamente sus ingresos y esto dificulta el cumplimiento de sus obligaciones para con sus trabajadores y para cumplir con sus proveedores. Así que amigo lector, hoy la iglesia necesita de nosotros y salvo su mejor opinión tenemos más que nunca acudir en su ayuda, no cree usted?