José Luis Rodríguez Flores.
Si bien no sería hasta el 1º de agosto de 1867 que don Benito Juárez reestablecería en definitiva la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pese a que fue José María Morelos y Pavón el precursor, tanto del Decreto Constitucional para la libertad de la América Mexicana, redactada en México, que puede considerarse la primera Constitución decretada por el congreso de Anáhuac, el 22 de octubre de 1814, en Apatzingán, Michoacán; en ella se plasmaron 242 artículos apareciendo, por primera vez el Supremo Tribunal de Justicia para la América Mexicana, hoy en la actualidad es Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Entonces el artículo 44 del citado decreto, establecía que la soberanía del pueblo correspondía al Supremo Congreso Mexicano, y que se crearían dos corporaciones, una con el título de Supremo Gobierno, y otra con el de Supremo Tribunal de Justicia, integrado por cinco individuos, que su número podría aumentarse por deliberación del congreso, según lo requirieran las circunstancias (Art. 181); que la corporación de individuos que compusieren este Tribunal, sería renovada cada tres años en la forma siguiente: en el primero y en el segundo saldrán dos individuos, y en el tercero uno; todos por medio de sorteo que haría el Supremo Congreso (Art. 183), que tendrían dos fiscales letrados, uno para lo civil, otro para lo criminal, (Art. 184); que tendría dicho tribunal el tratamiento de Alteza, para aquellos titulares del mismo, el de Excelencia durante el tiempo de la comisión, y el de su Señoría; y que los fiscales; y secretarios durante su ejercicio debían ser llamados como Señoría, lo anterior, resalta la trascendencia que le dio este decreto a la Suprema Corte de Justicia, Tribunal que funcionó en la Nueva España, instituido en Ario Municipio de Michoacán; enseguida menciono tres de sus primeros presidentes: José María Sánchez de Arriola, Antonio de Castro, y José María Ponce de León, pero como algunas resoluciones del alto Tribunal, fueron en contra de funcionarios del gobierno Realista, los Ministros y los insurgentes tuvieron que huir de las fuerzas realistas, pese a que Morelos intentó proteger a los insurgentes y ministros, con arrojo en Temalaca, Puebla, fue derrotado por Félix María Calleja, como resultado, fue aprendido Morelos, y luego sería fusilado en San Cristóbal de Ecatepec el 22 de diciembre de 1815, y fue disuelto el congreso y el Supremo Tribunal de Justicia.
En seguida se establecería el proyecto de Acta Constitutiva de la Nación o (Plan de Casa Mata) 28 de diciembre de 1823, apoyado por Vicente Guerrero contra Agustín de Iturbide, por primera vez usa el término Corte Suprema de Justicia, en vez de Tribunal Supremo que utilizaba la Constitución de Cádiz o también llamada la PEPA, en aquel tiempo tuvo la destacada participación de Miguel Ramos Arizpe en la comisión que elaboró el proyecto de Constitución Federal en 1823 y que fue aprobada casi íntegramente en octubre de 1824, entonces fueron elegidos varios magistrados, como Juan Nepomuceno Gómez Navarrete, Juan José Flores Alatorre, Manuel de la Peña y Peña, y José Domingo Rus y Ortega, principiando a funcionar la Suprema Corte en marzo de 1825.
La Suprema Corte sigue de pie, dando tumbos, con muchos problemas en su camino hacia lograr justicia, ya que en 1835 se establecieron siete estatutos, por eso se le conoció como la Constitución de las siete leyes, con este ordenamiento se suprimieron los tribunales de circuito, así como los juzgados de distrito, por lo que hubo un retroceso en la impartición de la justicia, en cuanto a que se le mutilaron importantes instituciones de su quehacer…. No obstante del establecimiento de la Constitución liberal de 1857, donde destacaron las lúcidas, y acaloradas participaciones de los insignes diputados Don Francisco Zarco, Don Ponciano Arriaga, desde luego la de Don Mariano Otero, sin embargo no se logró restaurar en forma adecuada la Suprema Corte de Justicia, pues en forma análoga, prevalecía derivado de la intervención francesa, entonces el gobierno itinerante por el país del ilustre Don Benito Juárez, por consiguiente no es hasta la conclusión del periodo de la Segunda Intervención Francesa, derrota, y fusilamiento de Maximiliano de Habsburgo, al lado de los generales conservadores, Miguel Miramón y Tomas Mejía, el 19 de junio de 1867 en el Cerro de las Campanas en Querétaro, que Juárez después de sortear con éxito arduas vicisitudes, sin embargo después de la caída del Segundo Imperio, Don Benito Juárez, hace su entrada triunfal a la ciudad de México, el 15 de julio de 1867, en aquel tiempo, por fin Juárez a la sazón pudo restablecer su gobierno.
Rápido, en pocos días, Juárez luego de su entrada triunfal, con decreto aplicado el 1º de agosto de 1867, restaura en definitiva la Suprema Corte de la Nación, Noble Institución que ha prevalecido desde aquella memorable fecha, hasta nuestros días, aunque es triste señalar que reciente ha sido vilipendiada, debido al dudoso actuar de algunos jueces, que como en la fruta, la podredumbre de una fruta, o el inapropiado proceder de unos cuantos individuos, que no honran su respetable profesión de abogado, que debiera ser tal y como lo establece la Constitución General de la República, en su artículo 17; que a la letra dice: – justicia que deberá ser administrada por tribunales que deberán ser expeditos, emitiendo sus resoluciones de manera pronta, completa e imparcial. Su servicio será gratuito, quedando en consecuencia prohibidas las costas judiciales. Fin de párrafo… por desgracia la conducta lesiva de pocos malos abogados obscurece el buen actuar de miles de jurisconsultos que se conducen de forma eficiente, y que a través de los muchos años de servicio, han dejado profunda huella de su diligente buen actuar; lamentable pero el canto de la sirena o posible ampliación de mandato por dos años del presidente del Tribunal de la Suprema Corte de la Nación vino a enrarecer el ambiente dándose hasta con la cubeta algunos magistrados, … tardía pero forzosa cancelación de ampliar por dos años más su gestión, al fin recapacitó el magistrado presidente Arturo Záldivar Lelo de la Rea, y canceló públicamente su intención de ampliar 2 años más su mandato para no contravenir la ley, y así de esa forma sensata preservar el estado de derecho; enhorabuena para todos los destacados buenos abogados, jueces, ministros, y magistrados…
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