ERNESTO GÓMEZ CRUZ, ACTOR FUERA DE SERIE

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Lic. Simón Álvarez Franco.

Nació el 7 de noviembre de 1933, murió en Ciudad de México el 6 de abril pasado. En su natal Veracruz alternaba los estudios con la fotografía callejera, según contó alguna vez en un cuaderno simple que traía siempre con él, la intención era buena y sería la base para algún día lo publicaría, cuando triunfara, hasta la fecha no se sabe si cumplió su objetivo dar a conocer su biografía. Todo comenzó a fijársele en su mente la sugestiva propuesta de un compañerito que lo invitó a estudiar arte dramático, aunque Ernesto deseaba ser cantante, pero su timidez y falta de preparación lo orillaron a dejar ese camino y continuar siempre con la idea del cine.

No sabemos cuánto tiempo, meses o años gozó de la beca en Bellas Artes, lo que sí es indudable es que nuestro sujeto tuvo que tener mucha dedicación y paciencia, pues a  los 34 años debutó con artistas prestigiados en una película que se ha convertido no sólo en clásica, también en guía e hito histórico para el cine nacional, aquí terminaron los dramas y lágrimas al estilo Griffel, Marga López y Lamarque, empezó “El Azteca” realista, de jóvenes, que vino a renovar una vez más las  pantallas, vocabularios, pasiones y estilos.

Ernesto Gómez Cruz 1933-2024

Sí, vino un cambio con nuevos directivos y artistas que logramos un éxito, y no, no es error que me incluya en la oración, pues yo también hice mi papel, modesto, pequeño, pero también valioso para mi vida.

Aquí deseo explicar a mis pacientes lectores el por qué me incluyo en la frase que cierra el párrafo anterior; sucede que por esa época ya había yo participado como protagonista principal en dos obras teatrales: “Las cosas Simples” y “Otra Historia”, esta resultó un bodrio y no se exhibió, simplemente fue enlatada y guardada, espero que para siempre.! Pero en el poco tiempo en escena conocí a Manuel Espinoza Jr., quien junto con Mauricio Wallerstein, hijo de don Gregorio del mismo apellido, famoso Productor y Director de cine reconocido como uno de los mejores de México, ambos muchachos más o menos de mi edad, nos juntábamos diariamente a las 4 de la tarde en la oficina del primero ubicada en los altos del Cine Alameda por la Ave. Juárez, justamente frente al hemiciclo erigido a la memoria del Benemérito héroe, para lo cual enviaban una limosina Cadillac puntualmente por mí, me esperaba su chofer con el elegante auto para seguir a diario con la planeación del rodaje de “Los Caifanes”.

Atendidos en dicha oficina por un personal pulcramente uniformados, con tragos y botanas de maravilla, recibíamos a actores ya consagrados como Julissa, Enrique Álvarez Félix, Oscar Chávez, a quien dimos el papel de “El Gato” en la película y a quien se debe una sinopsis de la historia; “narra un didáctico recorrido nocturno por cabarets, monumentos y “antros”, funerarias y dancings por la gran urbe”, también le hicimos adaptaciones al guion gracias a la ayuda y cooperación de la hermosa señora Rita Macedo, quien nos prestó su casa desinteresadamente para filmar las primeras escenas del jolgorio con que se inicia la película.

Hubo otra triste coincidencia en mi empleo bancario, el encargado de las páginas de Artes y Espectáculos en el Boletín que mensualmente se repartía a los 50 mil funcionarios y empleados en toda la república era Nils Landa Skanoff, al morir éste en un mortal accidente, dejó vacante su puesto. Vacante que cayó en mi persona, y que atendí con singular alegría, lo cual explica el por qué y el cómo con este nombramiento conocí y entrevisté a grandes figuras como Pepita Embil y don Plácido Domínguez, su esposo; Dolores del Río, Salvador Novo, Katy de Hoyos, en fin, cantidad de artistas y gente de la farándula.

Ernesto Gómez Cruz debutó con esta película en el papel de “El Azteka” lo que le valió para conseguir la primera de ocho estatuas Diosa de Plata y 9 Arieles por sus actuaciones en 200 películas, tales como Actas de Marusia, El Callejón de los Milagros, y muchas más. Fue un ejemplo de caballerosidad, esfuerzo y atención para sobresalir en la actuación hasta el fin de su vida.