Estocolmo, 07/10/24 (Más/IA).- Los investigadores estadounidenses Victor Ambros y Gary Ruvkun han sido galardonados con el Premio Nobel de Medicina 2024 por su descubrimiento de los microARN, pequeñas moléculas de ARN que juegan un papel esencial en la regulación de la actividad genética. Este avance ha tenido un profundo impacto en la comprensión del desarrollo y funcionamiento de los organismos vivos.
“Los microARN tienen una importancia fundamental para el desarrollo y el funcionamiento de los organismos”, afirmó el jurado de la Academia Sueca en su comunicado oficial al anunciar el premio.
El hallazgo, realizado en la década de 1990, reveló un nuevo nivel de regulación de los genes, algo que los científicos han perseguido entender por décadas. “Una alteración de la regulación de los genes puede causar enfermedades graves, como el cáncer, la diabetes o la autoinmunidad”, explicó el jurado, destacando la relevancia de este descubrimiento. Comprender cómo se regula la actividad genética es clave para prevenir y tratar diversas enfermedades.
Ambros, de 70 años y biólogo en la Massachusetts Medical School, y Ruvkun, de 72, profesor de genética en la Harvard Medical School, publicaron sus resultados en 1993, aunque trabajaban de manera separada. Ambos investigadores utilizaron como modelo un gusano diminuto, ‘Caenorhabditis elegans’, para estudiar las mutaciones celulares y las diferencias entre los tipos de células a partir de la misma secuencia genética.
Este trabajo reveló la existencia de los microARN, moléculas que ayudan a seleccionar qué genes se activan o desactivan en las células, permitiendo su especialización. “Su revolucionario hallazgo reveló un nuevo principio de regulación de los genes que resultó ser crucial para los organismos multicelulares, incluyendo los seres humanos”, subrayó el comunicado de la Academia.
La noticia del galardón sorprendió a los laureados en plena madrugada. “¡Es algo gigante! ¡Es un terremoto!”, expresó Ruvkun entusiasta a la radio pública sueca SR, mientras narraba cómo su perro no entendía por qué estaba corriendo por la casa antes de que saliera el sol. Ambros, por su parte, reaccionó con igual sorpresa: “¡Guau! ¡Es increíble! No lo sabía”, declaró en entrevista con el mismo medio.
Aplicaciones y futuro del microARN
Aunque el descubrimiento de los microARN ha abierto nuevas posibilidades terapéuticas, como señaló la profesora del Instituto Karolinska, Gunilla Karlsson Hedestam, su aplicación clínica aún está en desarrollo. “Numerosos ensayos están en curso, y no sólo contra el cáncer, pero también contra otras enfermedades”, afirmó, aunque reconoció que por el momento no hay una aplicación cercana.
El premio Nobel, además del prestigio científico, conlleva una recompensa de 11 millones de coronas suecas, el equivalente a más de un millón de dólares, que se repartirán entre los dos investigadores.
Este anuncio marca el inicio de la temporada Nobel, que continuará el martes con el galardón de Física, seguido del de Química el miércoles. El jueves se entregará el de Literatura, y el viernes, el esperado Nobel de la Paz. La serie concluirá el próximo lunes con el premio de Economía.
El Premio Nobel de la Paz, en particular, es considerado uno de los más impredecibles este año debido a las numerosas crisis que enfrenta el mundo. Dan Smith, director del Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI), no descarta la posibilidad de un “año blanco”, es decir, que el premio no se entregue, una opción que ya ha ocurrido en 19 ocasiones en la historia de los Nobel, la más reciente en 1972 durante la Guerra de Vietnam. El premio Nobel de Medicina del año pasado fue otorgado a los investigadores Katalin Kariko y Drew Weissman por su desarrollo de la tecnología de ARN mensajero, la cual fue fundamental en la creación de las vacunas contra el covid-19 de Pfizer/BioNTech y Moderna.
