Más de 100 mil habitantes reprueban y esperan una explicación verdadera por el negocio millonario que hizo el ex alcalde de Ramos Arizpe, Ricardo Aguirre Gutiérrez (2013-2017), y actual titular de la Comisión Estatal de Vivienda en Coahuila, por licitar en 2016 y autorizar en 2017 la firma del contrato por el servicio público de alumbrado por 20 años, y un monto de 863 millones 735 mil pesos a favor de la empresa NL Technologies.
Ahora, cuatro años después, el 21 de septiembre pasado, el alcalde José María Morales Padilla (2018-2021), que se desempeñó como secretario del Ayuntamiento durante la gestión de Aguirre Gutiérrez, decidió junto con el respaldo del Cabildo rescindir de dicho contrato a la compañía regiomontana por incumplir y retrasar pagos desde hace 10 meses, a pesar de que las autoridades pagaron 2 millones de pesos mensuales.
La ex alcaldesa ramosarizpense Lilia María Flores Boardman (2017-2018) se enteró y documento muchas irregularidades que cometió Ricardo Aguirre durante su administración y prefirió callar, porqué soñó -o así se lo hicieron creer- que podría reelegirse, y no fue así. José María Morales fue el candidato por el PRI y obtuvo una votación histórica de 20 mil 514 votos a favor.
Flores Boardman, quien fue la primera mujer alcaldesa en la historia de Ramos Arizpe, no quiso situaciones incómodas de ningún tipo y optó por seguir manteniendo todo en secreto. Después los ramosarizpenses se enteraron que su hijo Alejandro Blasco aparecía como regidor en la planilla de Morales Padilla.
La disciplina y hábil política pública del actual edil ramosarizpense fue más allá de lo que pudieran pensar sus colaboradores actuales en su administración, y en donde algunos de ellos se desempeñaron en su momento como ex funcionarios con Ricardo Aguirre.
Dudaron de que Morales Padilla tomara la decisión de rescindir el contrato con NL Technologies, de quien se asegura hizo ganar millones de pesos a Ricardo Aguirre, quien primero ganó la alcaldía de Ramos Arizpe por el partido Acción Nacional (2005-2009) y en su segundo periodo por los colores del Revolucionario Institucional.
Francisco Aguirre Vázquez, ex contralor en el periodo de Aguirre Gutiérrez, repitió en la actual administración; Edgar Flores Sánchez, ex director de Obras Públicas y actualmente secretario Técnico en el Gobierno Municipal; Glafiro Ayala Soto, ex tesorero y ahora se desempeña como director de Desarrollo Urbano; Alejandra Garza, ex directora de Comunicación Social, sigue en este mismo cargo; Darío Zertuche Cabrera, ex director de COMPARA, repitió en el Área de la Tenencia de la Tierra; y Cesar Flores Jiménez, entre otros, supieron del fructífero negocio de Ricardo Aguirre con la empresa regia y todos callaron.
Burló a las autoridades municipales
El incumplimiento de la empresa NL Technologies no tuvo límites, porque originó que, no solo el edificio de la Presidencia Municipal de Ramos Arizpe se quedara sin energía eléctrica, sino que también 17 circuitos del alumbrado público en diferentes colonias de la ciudad, el 7 de septiembre pasado.
Tuvo que ser necesario que José María Morales convocara a una rueda de prensa junto con Alejandro González Rodríguez, secretario del Ayuntamiento, Francisco Aguirre, Contralor Interno, y Jorge Soto Duarte, tesorero municipal, y respaldado por los integrantes de Cabildo, para informar que esta situación los obligó a pagar un adeudo de un millón de pesos a la Comisión Federal de Electricidad, que debió realizar, pero no lo hizo la compañía regiomontana.
NL Technologies incumplió con cinco puntos que marca el contrato, como es la instalación de 10 mil luminarias de led y su mantenimiento, además de 100 luminarias equipadas con cámaras de vigilancia. Nunca instaló una oficina en esta ciudad para atender los reportes, y no colocó los puntos con internet gratuito en lugares públicos.
Incluso, a la compañía regiomontana se le obligó a que aportara bienes adicionales como 5 mil luminarias adicionales, 400 luminarias decorativas artesanales y 200 botones de pánico. Nunca cumplió.
A pesar de lo que se pueda decir sobre la decisión que tomaron las autoridades municipales en este tema, el actual titular de la Comisión Estatal de Vivienda debe interpretarlo como un mensaje de que a partir del próximo primero de enero del año entrante, cuando José María Morales inicié su segundo periodo como alcalde (2022-2025) no estará su sombra de corrupción que dejó en la Presidencia, y no influirá en lo absoluto en las decisiones de contratos de todo tipo que se realicen durante la próxima administración.
Un punto interesante es que durante los dos periodos que se desempeñó Ricardo Aguirre Gutiérrez como alcalde, permitió asuntos de corrupción de todo tipo y malos manejos financieros, y si no que le pregunten a Armando Plata Sandoval, Auditor Superior del Estado, quien tiene carpetas con información bajo llave listos para sacar cuando así se lo ordenen.
Y si alguien tiene alguna duda solo tienen que preguntarle al ex alcalde Ramón Oceguera Rodríguez, quien en un par de semanas le armaron un expediente y cayó en prisión. Después salió del CERESO como si nada hubiera pasado y muy lejos de que regrese de nuevo a la política. Su retiro en silencio.
También, y aunque no lo quiera aceptar Edna Dávalos Elizondo, diputada local y esposa de Aguirre Gutiérrez, el caso de NL Technologies si dañó su imagen en su camino futuro para aspirar a la alcaldía de Ramos Arizpe. Y si a eso, se le suma el cateo que se realizó en su residencia por parte de la Fiscalía General de la República la madrugada del domingo 26 de mayo de 2019, si influyó para que la legisladora perdiera un importante número de simpatizantes en el municipio.
