- Desfiló el clasismo y la discriminación en supuesta defensa de la democracia.
Abigail Angélica Correa Cisneros.
Miles de personas marcharon rumbo a la Plancha del Zócalo para defender la no desaparición del INE y su derecho al voto, pero son temas que ni siquiera están en la mesa.
La convocatoria la hicieron personajes de la política, en su mayoría por dirigentes del PRI y del PAN y sobre todo en contra del Plan B del presidente Andrés Manuel López Obrador, que consiste en renovar al Instituto Nacional Electoral sin hacer cambios a la Constitución. Sus puntos principales son la reducción de presupuesto, eliminar fideicomisos, reducir sueldos y retirar prestaciones a los Consejeros. Con esto se pretende ahorrar 3 mil 605 millones de pesos.
En la manifestación del domingo la gente fue a defender el gasto excesivo de una institución que sólo derrocha el presupuesto que se le otorga, los sueldos de los consejeros mayores a los del presidente de México y la complicidad con los grupos que quieren volver al poder.
La semana pasada el Senado de la República aprobó el plan B de la Reforma electoral, con lo que inicia el plazo para reformar al Instituto Nacional Electoral (INE). Los cambios van desde la reducción del presupuesto y la estructura de las juntas locales. Significa que los salarios se reducirán y algunas plazas desaparecerán, por lo que muchos opinan que es un ataque a la democracia debido a que se estaría afectando los comicios por falta de equipo y material.
Por el otro lado, se trata de reducir gastos injustificados y duplicidad de funciones. Según las estimaciones del gobierno, solo el primer año permitirá ahorrar 5 mil millones de pesos (3 mil 500 millones del presupuesto directo y mil 500 millones de lo otorgado a organismos locales). AMLO propuso que ese dinero sea destinado a programas sociales o becas para estudiantes.
Con la aprobación del Plan B se plantea que las y los ciudadanos elijan a través del voto a consejeros y magistrados
La marcha del domingo reafirmó la manipulación que ejerce la oposición en los ciudadanos. Gran número de personas que asistieron declararon que no tenían idea de a qué iban, pero si no lo hacían serían afectados en sus empleos. Otras tantas mencionaron que defendían su derecho al voto, que no les quitaran sus credenciales para votar, que acudieron para proteger al organismo que vela por la democracia. Todo eso destacó en videos compartidos por creadores de contenido de distintas plataformas.
Con este cambio lo que se busca es disminuir los sueldos estratosféricos de los consejeros del INE. Solamente el año pasado, el consejero presidente Lorenzo Córdova percibió 2 millones 487 mil pesos. Esta claro cuánto le importa el INE pues pese a que en 2022 se redujo el presupuesto, Lorenzo Córdova siguió cobrando lo mismo y no sólo eso, además aumentó su sueldo en comparación con el año anterior.
Las prestaciones a las que tiene derecho el consejero presidente del INE son: aportaciones a seguridad social, ahorro solidario, prima vacacional, aguinaldo, prima quinquenal, seguro de vida institucional y seguro de gastos médicos mayores. Solo de aguinaldo, el consejero presidente recibe 106 veces más que una persona que gana el salario mínimo. Sólo de las percepciones de ese puesto son 475 mil 441 pesos.
Cuando el presidente AMLO propuso el Plan B, los altos mandos del INE alegaron la pérdida de empleos y la reducción de los salarios. Pero sólo se referían a los suyos, porque el resto de los empleados del instituto obtiene sueldos muy bajos. La percepción promedio va desde los 6 mil 112 pesos mensuales como auxiliar operativo a los 17 mil 324 mensuales como controlista.
También reciben prestaciones como prima vacacional, prima quincenal, aguinaldo, gastos funerarios e indemnización por fallecimiento, vacaciones, seguro de vida, colectivo de retiro y de separación individualizada. Tienen apoyo para alimentos por arriba de 11 mil pesos, más de lo que gana un empleado promedio. Cuentan con apoyo para gasolina.
Son estas cifras por las que los consejeros del INE no quieren la reforma, no tanto por defender la democracia o proteger a los trabajadores. La marcha del domingo pasado fue muy contundente en cuanto a quiénes le interesa que la democracia siga encontrado trabas.
Por una parte, los grupos de personas acarreadas y obligadas a asistir en apoyo a lo que muchos desconocen; y unos cuantos que sí entienden asistieron por temor a represalias. Por otro lado, los clasistas, los que gritaban “fuera los jodidos, los mediocres, los chairos y paleros”. Esa gente que menosprecia a otro ciudadano porque no tiene el mismo poder adquisitivo o académico y apoya el despilfarro del INE, no defienden la democracia.
La oposición ya anunció un Plan C, con el que buscarán tener la reestructura del INE, el recorte a su gasto y eliminación de su autonomía presupuestal.
Desde el Centro
Libra la cárcel el ex gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier Cabeza de Vaca, acusado de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita. La Fiscalía General de la República (FGR) anunció que apelará la sentencia que anuló la orden de aprehensión en su contra… También, hace unos días, el narcotraficante Ovidio Guzmán logró una suspensión definitiva en contra de la orden de extradición girada en su contra. Aunque el proceso de extradición continúa, el hijo de “El Chapo” sólo estaría ganando algo de tiempo antes de enfrentarse a la justicia estadunidense.