Coahuila volvió al primer cuadro informativo del país, con el anuncio de los líderes nacionales del Partido del Trabajo y del Movimiento de Regeneración Nacional sobre el respaldo al candidato morenista, Armando Guadiana Tijerina, y dejar solo a Ricardo Mejía Berdeja, cuando faltan tan solo horas para el día de la elección.
Antes, hubo otro pronunciamiento de la dirigente nacional del Partido Verde Ecologista de México, Karen Castrejón Trujillo, quien declinó a favor de Guadiana Tijerina y dejaron solo al mercenario y candidato de la Unidad Democrática de Coahuila, Lenin Pérez Rivera.
Estos hechos hicieron más fuerte al candidato de la alianza PRI, PAN y PRD, Manolo Jiménez Salinas, quien aventaja lo suficiente en las encuestas y su popularidad sube entre los coahuilenses.
Aún con todo esto que sucedió, los pronunciamientos de los dos partidos causaron una serie de lecturas entre los candidatos a la gubernatura. Para algunos analistas políticos, la negociación que hicieron Alberto Anaya del PT y el morenista Mario Delgado, lejos de favorecer a Guadiana Tijerina lo desfavorece en la votación que alcanzara el domingo 4 de junio, por lo próximo que está la elección.
Incluso, el mismo Armando Guadiana, cuando habló sobre esta unión de apoyo, coincidió con lo expuesto por los estudiosos de la política, aunque no acepta que cierra su campaña con una baja importante de popularidad a lo largo y ancho de la entidad, según lo establecen algunas empresas encuestadoras serías, ubicadas en la Ciudad de México, porque su imagen lo proyectó en las redes sociales y no en recorrer colonias populares de los municipios por contar con una edad que supera los 70 años.
Además, en una entrevista que le concedió al periodista Joaquín López Dóriga faltando cinco días de la elección, aceptó que si el resultado de la elección no le favorecía actuaría con madurez y no como un alzado de la política.
Pese a que enfocó su campaña en las redes sociales, el candidato Ricardo Mejía aseguró que la unión del PT a Morena lo favorece, solo que olvidó los 17 años que pasó fuera de su Estado, los cuales influyeron para no tener impacto entre quienes viven en esta entidad.
Desde ahora advierten los analistas políticos, que la maquinaria priista moverá su estructura en todos los municipios de Coahuila, por lo que buscarán conseguir 600 mil votos y un 52% de la lista nominal de electores registrado en el INE, que es de 2 millones 353 mil 697 ciudadanos.
En la elección de 2017, el gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís obtuvo el triunfo con 482 mil 891 votos contra 452 mil 031, que consiguió el panista Guillermo Anaya Llamas.
Sin duda, el ganador de la contienda del domingo 4 de junio será Manolo Jiménez Salinas.
