Rufino Rodríguez Garza.
Me he dado a la tarea de explorar pequeñas elevaciones, que por dirigirnos a sitios donde la densidad de grabados es mayor se descuidó el detallar estas lomas que presumíamos no tenían mayor importancia, pues me he dado cuenta que estas pequeñas lomas contienen vestigios que nos han proporcionado mucha información.
Me llevaron varias salidas en detallar esos lomeríos, empecé por la loma que está cerca del depósito (anillo) que sirve como abrevadero al ganado que deambula por estos parajes.
Este aguaje se surte de agua de un modesto pozo que utiliza energía solar.
En este momento es el único lugar para el ganado, pues las presas están totalmente secas.
Recorrí la loma de poniente a oriente y los grabados localizados son de suma importancia.
Uno de estos grabados es el de una mariposa, pero también las huellas de venados donde me llamó poderosamente la atención el tamaño de las mismas, pues son de una exquisitez a toda prueba por el tamaño (mini huellas) y en esta loma localicé dos sitios con estas huellas y de estas características.
Otro encuentro afortunado es el de otro sitio que contiene un pequeño tablero con 4 representaciones de astas o cornamentas de borregos cimarrones; grabados que no son muy grandes ya que van desde los 10 hasta los 20 centímetros de envergadura, lo que nos da idea de lo variado de la fauna en estos territorios norteños.
De igual forma también existieron osos, venados tanto cola blanca como bura, berrendos y por supuesto los escurridizos borregos cimarrones.
En las lomas bajas que enmarcan la represa natural, en la Lagunilla también se encuentran los cómputos a base de muescas. Son más bien raras y aisladas, pero aquí localizamos de esas cuentas.
También las clásicas cuentas a base de puntos, generalmente relacionados con eventos astronómicos.
Se observan grabados que relacionamos con territorialidad pero que bien puede tratarse del arma que llamamos onda.
Aunque pocas representaciones hay en esta elevación, algunas herramientas como lo son el Atlat’l o propulsor, también algunos proyectiles y por supuesto navajas enmangadas.
Observamos que los grabados de este sitio son de edad temprana, pues no se representó el arco y la flecha pero si el propulsor y/o Atlat´l, eso nos da la idea de lo antiguo de estos grabados; también aquí encontramos palimpsestos, es decir, se grabó y después de un tiempo se volvió a grabar, se encimaron los motivos sobre motivos.
En el entorno se localizan vestigios donde se aprecian antiguas chimeneas o fogones de los cazadores recolectores, al final de la loma que atraviesa un modesto arroyo se forma un vacío donde cuando llueve se estanca el agua, lo que permite que haya mucho palmas y otros arbustos. Crucé dicho arroyo, porque continuaban las lomas y se veían rocas grandes que son muy propias para el grabado, pero oh sorpresa! Nada de motivos rupestres a pesar de la buena factura de las piedras areniscas.
Aún falta continuar estas exploraciones que en un futuro próximo nos darán muchas sorpresas.
