La derrota de AMLO en las elecciones del 6 de junio

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Carlos Padilla Muñoz.

Aunque el Mesías AMLO haya hecho creer a los mexicanos, lógicamente muchos le creyeron, que su Gobierno de la 4- T y Morena obtuvieron una victoria global en las pasadas elecciones, presumiendo que lograron 11 gubernaturas en el país de las que estaban en disputa, les ocultó la verdad.

 Lo que el Presidente de la República no ha aclarado e informado en sus noticieros de Las Mañaneras, es que Morena logró solo 185 diputaciones federales, de las 253 que consiguieron en el 2018, o sea perdieron 67, y por si solo Morena no obtiene la mayoría para controlar el Congreso, por lo que tendrá que recurrir a sus aliados, que se venden al mejor postor, el Partido Verde, Movimiento Ciudadano y el Partido del Trabajo.

La oposición, los conservadores como les dice AMLO, consiguieron los votos suficientes con lo que lograron en la votación y las diputaciones plurinominales podrán finalmente mayoría, de tal forma que el Presidente necesitara de ayuda de algunos aliados, incluso lanzó sus redes para dialogar y negociar con el PRI, a lo que Alejandro Moreno, dirigente máximo del PRI, dijo que no son Judas políticos y que no habrá traiciones a pesar que la oferta es tentadora, algunas posiciones dentro de la administración, retiro de la iniciativa de promover juicio político contra los expresidentes priistas y panistas.

Es tanta la desesperación del Peje que también lanzó las redes para negociar con el PAN, para lograr los 300 diputados de los que necesitan, el Verde y el PT ya dijeron que irán en alianza en el Congreso, ya saborean los privilegios de que han venido gozando con la Cuarta T.

Otra estrepitosa derrota para Morena y la 4T de la pérdida de 9 delegaciones en la Ciudad de México, donde la Gobernadora Claudia Sheinbaum, principal precandidato para suceder a AMLO, fue castigada por la tragedia de la Línea 12 del Metro en los primeros días de mayo, aparte del alto índice de inseguridad que tiene la capital mexicana.

Desde los noventa el DF, ahora la Ciudad de México, es gobernada por gente del PRD y Morena, con Cuauhtémoc Cárdenas, López Obrador, Marcelo Ebrard y Miguel Ángel Mancera y ahora Sheinbaum.

Aun cuando Mario Delgado, Presidente Nacional de Morena, salga a tratar de limpiar la imagen de Sheinbaum, favorita de Andrés López Obrador, esta derrota podría traer como consecuencia que haya un cambio en la sucesión presidencial, aunque la ambición de AMLO está fundada en la manipulación de Sheinbaum, para seguir gobernando el país, en una reelección simulada.

Ciertamente que el triunfo de Morena en 11 estados fue un avance, pero de los 30 millones que votaron por AMLO en el 2018, no solo no superaron esta cifra, descendieron con solo 20 millones de votos, lo que presagia una derrota posible en el 2024.

Debacle de Morena en Coahuila

Aun cuando el partido guinda anunciaba con mucha anticipación un triunfo contundente en Coahuila, el PRI se llevó 30 alcaldías y cinco de los siete distritos legislativos. Fue una repasada de carro completo del año pasado.

En la Comarca Lagunera se ganaron las alcaldías de Torreón con Román Alberto Cepeda que arrasó con 138 mil votos, Viesca, San Pedro y Matamoros. También se ganaron los distritos 05 y 06 con Shamir Fernández y José Antonio Gutiérrez Jardón.

En Torreón participaron varios factores, una campaña intensa participativa del candidato Román Alberto Cepeda, una administración del alcalde panista Jorge Zermeño llena de escándalos con funcionarios corruptos arropados por el alcalde y rechazados por el partido azul, y la deuda de muchas promesas de campaña en mejoras de servicios municipales y una escasez de agua con políticas recaudatorias.

En Torreón la sorpresa fue que el candidato Luis Fernando Salazar Wolfort, padre del Niño Azul, Luis Fernando Salazar Fernández, terminó en segundo lugar con 86 mil votos por 58 mil del panista Marcelo Torres Cofiño.

Los analistas políticos aceptan que la desbandada en el PAN desde su dirigente municipal, Nacho García con más de 2000 panistas destacados, fueron factores determinantes para que el PAN terminara desfondado.

Para los torreonenses fue claro el mensaje que con alcalde priista y gobernador del mismo partido podrían aterrizar mejores programas, obras y beneficios, en los cuatro años anteriores hubo sequía de obras municipales que en un municipio de más de 3 mil millones de pesos de presupuesto anual, la obra más cara fue la Plaza de la Tortuga con solo 20 millones de pesos.

Mientras que el PRI se reagrupó, Morena fue un cúmulo de luchas intestinas por el poder, sin cabeza cupular y no aprovecharon los programas que bajó en la región el gobierno federal, vamos ni la amenaza de que podrían suspenderse las pensiones para las personas de la tercera edad, si el partido Morena y sus candidatos perdían la elección, cosa que no sucederá, porque entonces sería el harakiri del partido en el poder.